Cómo activar la intuición

La inteligencia intuitiva, o "sexto sentido", es una de las herramientas más valiosas y te da acceso a información que parece surgir de la nada. Nuestra conciencia nos habla: ¿conoces esa sensación de incomodidad o alivio frente a ciertas situaciones o personas? Esa es la intuición comunicándose contigo.

Intuición es la capacidad de percibir algo o a alguien. Existen diversas teorías que intentan explicar cómo ocurre este fenómeno. Sin embargo, en lugar de racionalizar y rechazar impresiones que puedan desafiar la lógica, comienza a prestar atención. Es una habilidad que se puede entrenar al igual que cualquier otro ejercicio.

¿Pero cómo entrenarla? ¿Y cómo saber si es intuición o "paranoia"?

Cuando te escuchas a ti mismo, asumes la responsabilidad de elegir prestar atención a esa voz y actuar en consecuencia. Debido al exceso de expectativas que cargamos, desarrollamos esa voz nerviosa del ego, la que vive exigiendo. La voz de la intuición es suave y persistente: es un susurro divino que nos reconforta.

Osho, en su libro "Intuición: el saber más allá de la lógica", sostiene que la intuición es una habilidad innata. Silenciar la mente repetitiva nos permite conectar con nuestra verdad interior. Disponer de la capacidad de presentir es un proceso, y para conectar con la intuición es fundamental desarrollar cierta autoconfianza.

Un consejo práctico es realizar pequeños juegos de adivinanza: adivinar el color del próximo coche que pasará, quién te está llamando, si va a llover, entre otros. Esto activará tu percepción y fortalecerá tu confianza. Como cualquier capacidad, puedes nacer con cierta facilidad, pero la diferencia real estará en la práctica.

En el libro "Mujeres que corren con los lobos", la autora sugiere definir la intuición no como un evento cuestionable, sino como la voz del alma. La intuición siempre nos guiará en una dirección beneficiosa, propiciando nuestra autopreservación.

Una mente exclusivamente racional tendrá dificultades para escuchar la intuición. Es necesario vaciar la mente para que la intuición pueda fluir. Puede suceder que nuestro ego tema esta capacidad, ya que nos hará ver las cosas como realmente son. Nos pondrá frente a una verdad cristalina, a veces difícil de aceptar.

Por lo tanto, el mayor desafío es superar la barrera mental y dar un salto hacia lo desconocido. Aprender a estar abiertos a los estímulos del día a día, o a los mensajes que recibimos en sueños a través de nuestro yo interior, abrirá un nuevo horizonte mucho más despierto ante todas las señales que nos rodean y nos permitirá tomar decisiones más acertadas en cualquier situación.